jueves, 28 de marzo de 2013

Con una mirada... me basta


Con una mirada... me basta

Con una mirada...
me basta,
con una sonrisa,
me llenas,
me calmas,
con un beso tuyo,
me alumbras el alma.

Si tú no me miras,
me ahogo en un pozo
de sombras y lagrimas.

Si tú no me miras,
si no me sonríes,
me llenas de angustia,
me hundes,
me matas,
me partes el alma;
pero un beso tuyo,
me ilumina el alma.

Con un beso tuyo,
soy todo,
sin un beso tuyo,
nada;
como luz apagada,
como ave sin rumbo,
como planta cortada,
lacia, mustia y apagada.

Con una mirada,
con una sonrisa
de miel embrujada,
con un beso tuyo,
me sobra..., y me basta.

 Autor: José Luis de Pedro Sanz
Todos derechos reservados.

miércoles, 27 de febrero de 2013

VIENTO


 VIENTO


Viento...,
que empujas las velas del barco,
en el que viajan amores y olvidos.
             
Viento...,
que mueves el aire que respiro
y traes aromas de flores
que llenan mis sentidos.
              
Viento...,
llévame  contigo,
quiero viajar por el aire
al país del amor esculpido.
            
Quiero flotar en el aire,
¡muy alto, muy alto!,
como si fuera un comino,
como lo hacen las hojas
de un árbol caído.
           
Viento...,     
tráeme por el aire
pasiones y olvidos,
recuerdos de nadie,
y amores perdidos.

Viento...,
llévame con ella...
quiero fundirme en su vacío,
quiero ser la brisa
que mueva su vestido,
quiero ser zumbido
que llegue a sus oídos,
y quiero ser la música
que llene sus sentidos.

Viento...
llévame contigo,
lejos de este mundo,
cobarde e impío.

Quiero que seas mi testigo,
que esparzas en el aire,
mis cenizas de un soplido,
y soples mi alma
hacia el país, del amor esculpido.

 Hoy ya soy, polvo en el viento,
que se pega a tu vestido,
soy el olor de tu almohada
que yace triste y callada.
            
Soy recuerdo en el olvido
del que siempre te ha querido,
soy esa luz apagada
que se impregna en tu mirada.

       Hoy ya viajo con el viento,
hoy ya no tengo equipaje,
soy la pasión escondida
que cicatriza tu herida.
           
Soy una nube que pasa
empujada por el viento,
y que tu la ves pasar
sin que la puedas tocar.
            
Soy ese rayo de luz
que te quiere consolar,
que dentro de ti, quiere entrar
para toda eternidad.

 Autor: Jose Luis de Pedro Sanz.